La Orden Hospitalaria de San Juan de Dios ha comparecido en el Grupo de Trabajo sobre la Renta Básica de Ciudadanía, creado por el Parlamento de Andalucía y presidido por Carmen Martínez Aguayo. Dentro de los trabajos que se están realizando, se contempla elaborar una ley que permita ofrecer una prestación económica que garantice a las familias la cobertura de las necesidades básicas. (Ver más imágenes en Flickr)

El Superior del Hospital del Aljarafe y responsable de los Servicios Sociales de Sevilla, José Miguel Valdés O.H., y el gerente de los Centros Asistencial y de Acogida de Málaga, José Luis Fuentes, comparecieron ayer ante los representantes políticos de Izquierda Unida, Partido Socialista y Partido Popular en el Parlamento andaluz para exponer su experiencia en el tratamiento con personas que están en situaciones de emergencia social, de exclusión o en riesgo de estarlo.

La propuesta que lanza la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios se centra en contribuir a que las personas nunca traspasen el umbral de la pobreza mediante la prestación de una ayuda económica, o mediante la prestación de un servicio. En este caso, si se trata de la prestación de una Renta Básica, la Orden ha orientado al Grupo de Trabajo sobre el marco en el que debe proporcionarse para permitir a una unidad familiar una independencia mínima en las actividades básicas de la vida diaria. Además, ha solicitado a los representantes políticos que las ayudas “tienen que ir acompañadas de compromisos formales por las dos partes” y que “hay que establecer una cultura del esfuerzo donde la sociedad se sacrifica aumentando los impuestos para ayudar a quien lo necesita, y quien es ayudado tiene que ayudar a la sociedad de acuerdo a sus posibilidades”.

Trabajar en red para paliar un mayor número de situaciones dramáticas y con mayor eficiencia

José Miguel Valdés O.H. expuso ante los miembros del Grupo de Trabajo el modelo de atención que vertebra todas y cada una de las áreas de intervención de la Orden Hospitalaria, “una asistencia integral basada en el carácter universal del respeto a la dignidad humana, que se hace explícito en tanto que todos los seres humanos somos iguales y merecemos igual consideración”.

El punto de partida del gerente de los centros malagueños en su intervención fue la definición de los conceptos de marginación, exclusión social y pobreza, aclarando que este último debe medirse no tanto por el nivel de ingresos que percibe un individuo, sino por lo que este es capaz de hacer con estos ingresos. En este sentido, Fuentes indicó que “si se es pobre, se está marginado y, por supuesto, excluido, pues la exclusión social engloba las causas y efectos tanto de la pobreza como de la marginación”.

Los representantes de la Orden Hospitalaria centraron el ámbito de actuación en casos de pobreza y exclusión social en la prevención, siempre que se puedan detectar focos de desafiliación; y en el abordaje en red, trabajando coordinadamente y poniendo en común  “todos los recursos de entidades públicas y privadas, para ser más eficaces y eficientes con los recursos de los que disponemos”, adviertió José Luis Fuentes.

Martínez Aguayo y los representantes de IU, PSOE y PP del Grupo de Trabajo agradecieron la participación y los apuntes con los que la Orden ha hecho su aportación a este proyecto así como reconocieron la labor social que ha caracterizado a la Orden Hospitalaria en todas sus intervenciones sociales. La intención de mejorar la situación y el entorno de quienes más lo necesitan es compartida, y por ello, José Miguel Valdés O.H. concluyó su intervención con el deseo de que “entre las administraciones e instituciones públicas y privadas sepamos ser audaces y dejar atrás viejas formas de hacer caridad: hoy tenemos que darles lo que en justicia les pertenece”.